Las delegaciones de los países vecinos se plegaron al reclamo contra el gobierno libertario. Pase de facturas entre Francos y Mondino. “Yo estoy 800 lucas abajo”, se quejó un parlasureño que se paga los viajes.
Los parlamentarios de las delegaciones de Brasil, Paraguay, Uruguay, Bolivia y Argentina en el Parlasur rechazaron este lunes, durante la sesión que mantuvieron en Asunción, el recorte de Javier Milei que termina con el pago de los traslados y viáticos de los representantes locales.
Desde 2015, los parlasureños argentinos no perciben ninguna dieta ni cuentan con asesores o equipos técnicos pero, luego de la publicación de la decisión administrativa de Milei en el Boletín Oficial del 17 de septiembre, tampoco recibirán dinero para alojamiento ni pasajes.
La moción fue impulsada por el brasileño Celso Rusomano, quien consideró que “la medida afecta de muerte a la institución multilateral que representa las aspiraciones de integración de todos los pueblos del Mercosur”, y agregó: “Sin los parlamentarios argentinos, nuestro parlamento regional se ve impedido de cumplir con sus tareas y de ejercer su misión como el mayor órgano legislativo del bloque”.
Fuentes legislativas explicaron a LPO que el reglamento establece que para que haya quórum en el Parlasur debe estar representado al menos un bloque de cada delegación, más allá de alcanzar el número suficiente para formar mayoría en una sesión. De hecho, Argentina cuenta con 43 representantes electos por el voto popular, en representación de Unión por la Patria, Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza, y solos 25 asistieron a Paraguay este lunes.
Un diputado parlasureño le dijo a LPO que tratará de seguir yendo a las sesiones pero admitió que se le hacía cuesta arriba y que ya casi no pueden viajar para los trabajos en las comisiones. “Yo estoy 800 lucas abajo”, se quejó, y reconoció: “hay otros que ya ni van porque no pueden sostenerse y tienen que cuidar su laburo”.
La decisión de Milei involucró al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y la canciller Diana Mondino. Un funcionario del Ejecutivo admitió que “se pasan la pelota entre ellos”, mientras que un diputado opositor denunció: “Francos culpa a Mondino y Mondino dice que no sabe nada y que es un tema de Francos pero los libertarios están re calientes e incluso algunos no viajaron a Asunción porque todavía les deben los viáticos de la sesion anterior”.
Luego de votar por la afirmativa la moción propuesta por Rusomano, la parlamentaria Lilia Puig, electa por Cambiemos, señaló que “la representación popular es un derecho ciudadano” y alertó que bajo la gestión de Milei se vive “un proceso de desprecio institucional”.
El jefe de la delegación argentina, Gabriel Fuks, explicó que “esta decisión de Jefatura de Gabinete se enlaza con una sucesión de acciones del gobierno argentino contra el Mercosur y la integración regional”.Además, reveló que se envió una nota a Francos y otra a Mondino solicitando la creación de “una mesa de trabajo para dar una solución a esta situación institucional”.
La afrenta que le imputan al gobierno libertario contra el Parlasur ya tuvo otros capítulos, como la tensión que se vivió cuando ejerció la Presidencia Pro Tempore el salteño Alfredo Olmedo y decidió poner patovicas en Montevideo. Ya en ese momento, los legisladores se quejaban porque Olmedo había dejado de garantizarles el pago de las combis para trasladarse desde el lugar donde se hospedaran hasta el recinto.
La diferencia de la delegación argentina con las de los países vecinos es que en los otros casos los diputados del Mercosur también ocupan bancas en el Poder Legislativo de sus lugares de origen. “Perciben una dieta como diputados en sus países y un plus que pagan sus países para que asistan al Parlasur”, comentó una argentina.
Recientemente, llegaron a la Corte recursos de amparo de ex parlasureños pero una mayoría compuesta por Ricardo Lorenzetti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Rosenkrantz consideró que el máximo tribunal no tenía competencia sobre el asunto, mientras que Horacio Rosatti opinó en su fallo que el pago de las dietas le correspondía al Parlasur.
Entre los legisladores kirchneristas interpretan que el gobierno se aferró a ese argumento y alegó que los gastos debe solventarlos el Parlasur con el dinero que paga el Estado nacional en concepto de cuota como miembro del Mercosur. Sin embargo, advierten, “ese aporte no fue incluido en el presupuesto de este año ni el que se votará en próximamente para el periodo 2025”.
Más allá del escándalo diplomático que Milei, Mondino y Francos podrían ocasionar en el Mercosur si no abonan los pasajes de los diputados, un parlasureño libertario adelantó a LPO que se avecina una nueva pelea para cuando el cuerpo deba sesionar en Argentina, en noviembre.
Como el recinto de Montevideo está en refacciones, los diputados decidieron rotar de países en cada encuentro. Ya sesionaron en Colonia, Foz de Iguazú y Asunción y los libertarios y los peronistas se pelean ahora para definir si juntan quórum en La Plata, para beneficio de Axel Kicillof, o si lo hacen en el Senado de la Nación, para complacer a Victoria Villarruel. Ninguno estaría pensando en Martín Menem y la Cámara de Diputados.